El Templo Dorado, conocido en la India como Harmandir Sahib, es un templo sij ubicado en la localidad india de Amritsar, cerca de la frontera pakistaní (en el estado de Panyab).
Los sijs lo consideran su templo más sagrado y deben peregrinar allí, para orar y ofrecer sus plegarias, al menos una vez en la vida.
Los sijs lo consideran su templo más sagrado y deben peregrinar allí, para orar y ofrecer sus plegarias, al menos una vez en la vida.
El Sijismo
El Sikh dharma o Sijismo es una de las religiones monoteístas más recientes surgida en el norte de India, actual Pakistán. Fue fundada por Gurú Nanak (1469-1539) y desarrollada por sus nueve sucesores en los siglos XVI y XVII, época de constantes conflictos entre el Hinduismo y el Islam. El Sijismo promueve la tolerancia entre las religiones y rescata lo esencial de ellas, despojándolas de supersticiones, rituales y fanatismo.
“Considera a todos los hombres como tus iguales,
la luz de Dios está en cada corazón".
Gurú Nanak
la luz de Dios está en cada corazón".
Gurú Nanak
A pesar de tan reciente, el Sijismo es la quinta religión más popular del mundo, con aproximadamente 23 millones de creyentes alrededor del mundo. La vasta mayoría vive en Punjab, un estado del noroeste de India. El término sikh proviene del sánscrito shishya, que significa discípulo. Los Sikhs son los discípulos de sus diez gurús (maestros espirituales): el primero y fundador, Gurú Nanak (1469 - 1539) y los que lo sucedieron hasta el último, el Gurú Gobind Singh (1666 -1708). Él dio por finalizada la tradición de los gurús humanos al nombrar como su eterno sucesor a la sagrada escritura Sikh, el Adi Granth, también llamado Guru Granth Sahib. Este libro santo ocupa un lugar de privilegio en los templos Sikh; los gurudwaras. Gurú significa maestro espiritual, literalmente: “Aquél que disipa la oscuridad”.
Tolerancia y paz son una de las palabras claves de esta religión, que se pronunció contra el sistema de castas hindú y el fanatismo musulmán, y se destaca por promover un trato igualitario hacia las mujeres. Constante meditación en Dios y Su luz, repetición del Nombre, vida honesta y servicio al necesitado son las principales prácticas de los creyentes.
Los Sikhs tienen una larga trayectoria en denunciar injusticias y proteger a los indefensos. De hecho, el noveno Gurú Tegh Bahadur ofreció su cabeza para salvar a unos sacerdotes hindúes amenazados por los gobernantes musulmanes. Paradójicamente, esta religión de fraternidad y tolerancia fue muy pronto perseguida por los mongoles que invadieron India de 1526 a 1857, y que pertenecían al Islam. Tal es así que el quinto Gurú Arjan Dev, famoso por su recopilación de las sagradas escrituras, murió cruelmente martirizado. Su hijo y sucesor, el Gurú Hargobind, estableció que los devotos aprendieran artes marciales y se armaran. Fue así como la comunidad Sikh inició su tradición militar. Hoy en día los generales del ejército de India son en su mayoría Sikhs.
VIDA DE GURÚ NANAK (1469 – 1539)
Gurú Nanak es el fundador del Sijismo o Sikh Dharma, su nombre original. Al igual que sus nueve sucesores, predicó con el ejemplo y fue reverenciado tanto por hindúes como por musulmanes. Durante una época de gran desastre social y conflicto religioso, su mensaje resultó un puente hacia Dios y la espiritualidad. Su enseñanza tomó casi 240 años en expandirse, y lo hizo de la mano de sus nueve sucesores.
Infancia y juventud
Gurú Nanak nació en 1469 en la aldea Talwandi (hoy conocida como Nankana Sahib en su honor) en Punjab, región actualmente dividida entre Pakistán y la India. Sus padres eran hindúes de la casta comerciante y tuvieron dos hijos: Nanak y su hermana Nanaki.
Los Janam sakhi (relatos sobre la vida de Gurú Nanak) lo retratan como un joven contemplativo, amante de la plegaria y la meditación. En su infancia, Nanak tomó clases de sánscrito, matemáticas y árabe, de manera tal que podía hablar a hindúes y musulmanes en su propia lengua.
Si bien Nanak aprendía con gran facilidad, su familia estaba preocupada por su poco interés en los asuntos mundanos. El padre le asignó la responsabilidad de pastorear el ganado familiar, tarea que le permitió pasar largas horas meditando. Una mañana de verano, el pequeño Nanak se quedó dormido bajo la sombra de un árbol. Con el movimiento del sol, la sombra se fue corriendo y los rayos le daban directo en su cara. Una gran cobra se paró a su lado para protegerlo del sol. Rai bular, el oficial a cargo del área, pasaba por allí acompañado por sus asistentes y se detuvo a mirar la extraña escena. Fue así como se convenció de que Nanak no era un ser común y se volvió su discípulo.
Gurú Nanak es el fundador del Sijismo o Sikh Dharma, su nombre original. Al igual que sus nueve sucesores, predicó con el ejemplo y fue reverenciado tanto por hindúes como por musulmanes. Durante una época de gran desastre social y conflicto religioso, su mensaje resultó un puente hacia Dios y la espiritualidad. Su enseñanza tomó casi 240 años en expandirse, y lo hizo de la mano de sus nueve sucesores.
Infancia y juventud
Gurú Nanak nació en 1469 en la aldea Talwandi (hoy conocida como Nankana Sahib en su honor) en Punjab, región actualmente dividida entre Pakistán y la India. Sus padres eran hindúes de la casta comerciante y tuvieron dos hijos: Nanak y su hermana Nanaki.
Los Janam sakhi (relatos sobre la vida de Gurú Nanak) lo retratan como un joven contemplativo, amante de la plegaria y la meditación. En su infancia, Nanak tomó clases de sánscrito, matemáticas y árabe, de manera tal que podía hablar a hindúes y musulmanes en su propia lengua.
Si bien Nanak aprendía con gran facilidad, su familia estaba preocupada por su poco interés en los asuntos mundanos. El padre le asignó la responsabilidad de pastorear el ganado familiar, tarea que le permitió pasar largas horas meditando. Una mañana de verano, el pequeño Nanak se quedó dormido bajo la sombra de un árbol. Con el movimiento del sol, la sombra se fue corriendo y los rayos le daban directo en su cara. Una gran cobra se paró a su lado para protegerlo del sol. Rai bular, el oficial a cargo del área, pasaba por allí acompañado por sus asistentes y se detuvo a mirar la extraña escena. Fue así como se convenció de que Nanak no era un ser común y se volvió su discípulo.
Sus largas horas de pastoreo le permitieron conocer a religiosos hindúes y musulmanes que andaban por los bosques. Allí conoció a Bhai Mardana, uno de sus principales discípulos que lo siguió por 47 años, escuchando y cantando el góspel del Gurú.
Nanak lamentaba los enfrentamientos religiosos, especialmente entre hindúes y musulmanes, así como las supersticiones y fanatismos que apartaban al ser humano de Dios. Su intención era llegar a la Realidad más allá de las diferencias superficiales entre las religiones.
Su hermana Nanaki decidió ayudar a sus padres y logró que su marido empleara a Nanak como dependiente de una pequeña tienda de granos. Además, hizo los arreglos para su casamiento. Cuando Nanak cumplió dieciséis se casó con Sulakhani, hija de un comerciante de arroz, con quien tuvo dos hijos: Sri Chand en 1494 y Lakshmi Chand tres años después. El mayor era un asceta y llegó a tener un considerable número de seguidores, conocidos como los Udasis. En cambio, el hijo menor vivió una vida corriente.
El despertar
Una mañana, Nanak fue al río Baain en cuya rivera se sentó sumido en profunda meditación. Tenía treinta años. Allí alcanzó la suprema realización, y por tres días permaneció ausente en gloriosa visión. Al cuarto rompió su silencio y declaró: “No hay hindúes ni musulmanes".
Esta frase no podía pasar desapercibida en una época en que hindúes y musulmanes peleaban constantemente. Sin embargo, nadie la comprendía. Los qazis (sacerdotes musulmanes) preguntaron a Gurú Nanak por su significado, pero no recibieron respuesta. Lo invitaron a la mezquita y él aceptó, pero cuando todos se arrodillaron para orar, él comenzó a reír. Al finalizar la plegaria, un hombre lo increpó por su falta de respeto hacia las prácticas musulmanas. Nanak le contestó: "Tú no estuviste orando, sino pensando en tu yegua que ha parido". Y dijo al sacerdote: "Y tú estabas en Kabul comprando caballos". Avergonzados, ambos inclinaron sus cabezas y reconocieron que Gurú Nanak había dicho la verdad. Luego le preguntaron quién era. Él contestó: "Si digo que soy hindú ustedes me matarán, y musulmán no soy. Soy un muñeco hecho de cinco elementos, en el cual algo invisible juega, ese algo invisible es lo que yo soy".
Su visión de la Realidad aparece en el Mool Mantra, la primera parte de un himno compuesto por él, el Japji Sahib – la canción del corazón:
Hay un solo Dios,
Su nombre es Verdad.
Él es el Creador omnipresente,
No tiene miedo ni enemigos,
Él es sin tiempo, sin nacimiento y sin causa,
y es experimentado por la gracia del Gurú.
Gurú Nanak no creía en el sistema de castas ni en ningún tipo de distinción basada en raza, religión o género. Atestiguó la invasión Mongol de India (1526-1857) cuya religión era el Islam, y vio los horrores infligidos a la gente:
Nanak lamentaba los enfrentamientos religiosos, especialmente entre hindúes y musulmanes, así como las supersticiones y fanatismos que apartaban al ser humano de Dios. Su intención era llegar a la Realidad más allá de las diferencias superficiales entre las religiones.
Su hermana Nanaki decidió ayudar a sus padres y logró que su marido empleara a Nanak como dependiente de una pequeña tienda de granos. Además, hizo los arreglos para su casamiento. Cuando Nanak cumplió dieciséis se casó con Sulakhani, hija de un comerciante de arroz, con quien tuvo dos hijos: Sri Chand en 1494 y Lakshmi Chand tres años después. El mayor era un asceta y llegó a tener un considerable número de seguidores, conocidos como los Udasis. En cambio, el hijo menor vivió una vida corriente.
El despertar
Una mañana, Nanak fue al río Baain en cuya rivera se sentó sumido en profunda meditación. Tenía treinta años. Allí alcanzó la suprema realización, y por tres días permaneció ausente en gloriosa visión. Al cuarto rompió su silencio y declaró: “No hay hindúes ni musulmanes".
Esta frase no podía pasar desapercibida en una época en que hindúes y musulmanes peleaban constantemente. Sin embargo, nadie la comprendía. Los qazis (sacerdotes musulmanes) preguntaron a Gurú Nanak por su significado, pero no recibieron respuesta. Lo invitaron a la mezquita y él aceptó, pero cuando todos se arrodillaron para orar, él comenzó a reír. Al finalizar la plegaria, un hombre lo increpó por su falta de respeto hacia las prácticas musulmanas. Nanak le contestó: "Tú no estuviste orando, sino pensando en tu yegua que ha parido". Y dijo al sacerdote: "Y tú estabas en Kabul comprando caballos". Avergonzados, ambos inclinaron sus cabezas y reconocieron que Gurú Nanak había dicho la verdad. Luego le preguntaron quién era. Él contestó: "Si digo que soy hindú ustedes me matarán, y musulmán no soy. Soy un muñeco hecho de cinco elementos, en el cual algo invisible juega, ese algo invisible es lo que yo soy".
Su visión de la Realidad aparece en el Mool Mantra, la primera parte de un himno compuesto por él, el Japji Sahib – la canción del corazón:
Hay un solo Dios,
Su nombre es Verdad.
Él es el Creador omnipresente,
No tiene miedo ni enemigos,
Él es sin tiempo, sin nacimiento y sin causa,
y es experimentado por la gracia del Gurú.
Gurú Nanak no creía en el sistema de castas ni en ningún tipo de distinción basada en raza, religión o género. Atestiguó la invasión Mongol de India (1526-1857) cuya religión era el Islam, y vio los horrores infligidos a la gente:
Los reyes son bestias feroces, los ministros son perros.
Esta Era es un cuchillo, y los reyes son los carniceros.
En la noche oscura del mal, la luna de la rectitud no se ve en ningún lado.
Esta Era es un cuchillo, y los reyes son los carniceros.
En la noche oscura del mal, la luna de la rectitud no se ve en ningún lado.
Su misión
Tras su Iluminación, Gurú Nanak viajó durante quince años a través de la India, la zona del Tíbet, Bengala y Sri Lanka. En su cuarto gran viaje fue a Arabia y Persia, donde visitó la Meca, Medina y Bagdad. Cuentan los textos sagrados que al llegar a la Meca, Nanak se acostó con los pies apuntando hacia la sagrada Kaaba (un cubículo dentro de la mezquita), signo de falta de respeto para el Islam. Un cuidador musulmán pasaba por ahí y al ver la escena, lo regañó. Gurú Nanak respondió: “Por favor, pon mis pies hacia un lugar donde Dios no esté”.
Después de quince años, Gurú Nanak regresó a su casa en Punjab y se estableció en Kartharpur con su esposa e hijos. Mucha gente llegaba de cerca y de lejos a escuchar los himnos y las enseñanzas del maestro. Sus seguidores se reunían en las mañanas y en las tardes para hacer servicios religiosos. Gurú Nanak estableció el comedor público llamado Langar, donde todos compartían alimentos, sean reyes o peones.
Una mañana de 1532, mientras Gurú Nanak trabajaba en los campos, se acercó un hombre y le dijo: "Yo soy Lehna," (lehna en punjabi significa acreedor). Gurú Nanak le respondió “¿Has venido al fin a pagar tu lehna? Te he estado esperando". Lehna era un gran devoto de Durga, un aspecto de la madre divina del hinduismo. Un día escuchó acerca de Gurú Nanak y decidió visitarlo; a partir de entonces se convirtió en un su ferviente discípulo. Su devoción era absoluta, cuando no trabajaba en la granja pasaba su tiempo libre contemplando a Dios. Asimismo, pasó todas las pruebas que Gurú Nanak ponía a sus discípulos para saber quién era el más sincero en su devoción. “Verdaderamente eres ‘Angad’, parte de mi propio Ser”, le dijo un día Gurú Nanak. Tan pronto como llegó el tiempo de su partida, Nanak lo nombró como Su sucesor espiritual y Angad se convirtió en el segundo gurú.
El adiós
Antes de su muerte a los setenta años, los hindúes querían cremarlo y los musulmanes, enterrarlo. Gurú Nanak les dijo: "Pongan flores a mis dos lados, hindúes a la derecha, musulmanes a la izquierda. Las flores que estén frescas mañana serán las que decidan cómo se dispondrá de mi cuerpo". Les pidió que rezaran, se acostó y se cubrió con una sábana. En las primeras horas de la mañana del 22 de septiembre de 1539, Gurú Nanak se integró a la luz eterna. Cuando sus seguidores quitaron la sábana, no encontraron nada excepto las flores, que estaban frescas de ambos lados. Los hindúes tomaron las suyas y las quemaron, y los musulmanes las enterraron.
SU ENSEÑANZA
“Conocerá la pureza todo aquel y aquella que repita Su nombre con devoción y un amor sincero”.
Gurú Nanak
Nacido en el seno de una familia hindú, Gurú Nanak enseñó la unidad del creador y la hermandad fundamental de todos los seres. Su mensaje era universal y predicaba la igualdad de las religiones, condenando las supersticiones, la idolatría, el ritualismo y el fanatismo. Rechazaba la noción de divisiones basadas en religión, raza, casta o género. Especialmente, defendía a la mujer ante quienes la consideraban mala o inferior.
Su filosofía simple pero profunda descansaba en la divinidad fundamental de todos los seres. Con esta conciencia de la Luz divina dentro de todos, la vida humana puede volverse una profunda experiencia de amor, verdad, paz, paciencia y contento. El cuerpo humano es un vehículo para experimentar a Dios en cada uno y en toda la creación. Experimentar a Dios en vida genera amor, bienaventuranza y paz.
Para lograrlo, Gurú Nanak enseñó tres principios fundamentales:
1. Recordar el nombre de Dios en todo momento.
2. Ganarse la vida de forma honesta y practicar la rectitud.
3. Compartir una parte del tiempo y riqueza con los menos afortunados.
SUS NUEVE SUCESORES
Al igual que Gurú Nanak, sus sucesores son considerados verdaderos Gurús. Todos se destacaron por su compasión, desapego y sabiduría, y no dudaban en sacrificar sus vidas para proteger a los indefensos.
Gurú Angad Dev (1504-1552)
• Compiló la biografía de Gurú Nanak, conocida como Janam Sakhi.
• Introdujo la escritura Gurmukhi y promovió el aprendizaje de la lengua Punjabi (originaria de Punjab).
• Compuso 63 himnos del Adi Granth.
• Abrió una escuela en Khadur Sahib para enseñar a los niños el alfabeto Gurmukhi.
• Compiló los himnos de Gurú Nanak y esparció sus enseñanzas.
Gurú Amar Das (1479-1574)
• Se convirtió en gurú a los 73 años.
• Insitucionalizó la cocina comunal llamada langar. Cualquiera que pretendiera tener una audiencia con él, sea rey o mendigo, antes debía comer junto a los demás.
• Promovió la igualdad, especialmente hacia las mujeres. Trató de liberar a las musulmanas del purdah (velo) y predicó fuertemente contra la práctica del sati (por la cual la viuda hindú era cremada viva en la pira funeral de su marido).
• Autor de 869 himnos del Adi Granth.
Gurú Ram Das (1534-1581)
• Fundó la ciudad de Amritsar, Noroeste de India, en 1574.
• Compuso el himno Lawan, pronunciado en la ceremonia de casamiento Sikh conocida como Anand Karaj (que significa Ceremonia de Bienaventuranza).
• Difundió el Sikhismo en el Norte de India.
• Organizó la estructura de la sociedad Sikh.
• Enfatizó en la importancia del Kirtan (cantar himnos), una parte fundamental del culto Sikh.
• Autor de 638 himnos del Adi Granth.
Gurú Arjan Dev (1563-1606)
• Compiló el Adi Granth en 1604.
• Construyó el Templo de Oro (Harmandir Sahib).
• Instaló la práctica del diezmo (daswandh) para propósitos comunitarios.
• Autor de Sukhmani Sahib bani –la Plegaria de la Paz.
• El primer Gurú que murió martirizado. El emperador Jahangir lo encarceló y martirizó en 1606 por negarse a enmendar el Adi Granth. Lo sentaron en una placa de hierro abrasador y le arrojaron arena hirviendo. Gurú Arjan Dev toleró el dolor cantando los himnos.
• Compuso 2312 himnos del Adi Granth.
Guru Hargobind (1595-1644)
• Hijo de Gurú Arjan Dev, transformó a los Sikhs al introducir artes marciales y armas para la defensa de las masas.
• Usaba dos espadas, una simbolizaba al poder secular (mirir) y la otra al poder espiritual (piri).
• Construyó el Akal Takht en 1608 en la ciudad de Amritsar, Punjab.
• Pasó aproximadamente dos años encarcelado en el fuerte de Gwalior. Cuando salió, logró que liberaran a 52 princesas hindúes que también eran prisioneras políticas del fuerte.
• Peleó cuatro batallas contra los mongoles, que forzaban a la gente a convertirse al Islam, so pena de muerte.
Gurú Har Rai (1630-1661)
• Continuó las tradiciones militares de su abuelo, Gurú Hargobind.
• Defendió la integridad del Adi Granth al negarse a cambiar sus palabras.
• Transformó el Sikhismo en una religión fuerte y popular. Nombró como sucesor a su hijo de tan solo cinco años, Gurú Harkrishan.
Gurú Harkrishan (1656-1664)
• El Gurú más joven de la tradición Sikh, nombrado a sus cinco años.
• Atendió y curó a los enfermos durante una epidemia de viruela en Nueva Delhi, y murió por contagio a los ocho años.
• En su memoria se construyó el Gurudwara Bangla Sahib en Nueva Delhi, donde se hospedaba durante su visita.
• Antes de morir, nombró como sucesor a su tío abuelo, Gurú Tegh Bahadur.
Gurú Tegh Bahadur (1621-1675)
• Construyó la ciudad de Anandpur Sahib.
• Sacrificó su vida defendiendo el "derecho a libertad de religión", ofreciendo su cabeza para salvar a sacerdotes hindúes.
• Fue martirizado y decapitado por el Emperador mongol Aurangzeb.
Gurú Gobind Singh (1666-1708)
• Hijo de Tegh Bahadur.
• En 1699, Gurú Gobind Singh bautizó a los Sikhs y creó el Khalsa (la hermandad pura). Khalsa es una comunidad de Sikhs que se dedican a vivir los ideales de la religión.
• Estableció el uso de las cinco "K" (más adelante).
• Compiló el Dasam Granth Sahib, segundo volumen del Adi Granth, de 1428 páginas.
• Autor de muchos banis (himnos) que los Sikhs recitan diariamente: Jaap Sahib y Chaupai.
• Escribió su autobiografía, el Bichitra Natak.
• Indicó a los hombres usar el apellido Singh (que significa león) y a las mujeres, Kaur (que significa princesa), para establecer igualdad entre todos, dado que en India los apellidos hacen referencia a las castas.
• Sus cuatro hijos fueron martirizados por los mongoles.
• Puso fin a la tradición de gurús humanos, estableciendo a las Sagradas Escrituras Sikh (Adi Granth) como Gurú Eterno.
LAS SAGRADAS ESCRITURAS
El Adi Granth es el libro sagrado de los Sikhs, su eterno Gurú. Su lectura es una plegaria en sí misma; en la que los Gurús, santos y poetas adoran a Dios y derraman su sabiduría y consejos. Los Sikh aseguran que los Gurús, en su pureza, recibieron el mensaje de Dios. Así, la palabra del Gurú o Gurbani entona la mente y abre el corazón al Despertar espiritual.
El Adi Granth tiene un lugar de privilegio en la comunidad Sikh: es su guía suprema y está en todos los templos (Gurudwaras) y hogares. Contiene un total de 5867 himnos en 1430 páginas que se dividen en dos volúmenes: el Guru Granth Sahib y el Dasm Granth. El primero contiene los himnos del Gurú Nanak, Angad, Amardas, Ramdas, Arjan, Teg Bahadur y un par de estrofas del Gurú Gobind Singh. También hay himnos llamados Bhagatts escritos por Santos: Kabir, Farid, Namdev, Ravidas, Dhanna, Beni, Sain, Jaidev, Bhika, Ramananda, Sadna, Surdas s y Trilochan, y quince Bahtts, himnos compuestos por devotos.
El segundo volumen de las escrituras sagradas, el Dasm Granth, tiene solo los himnos del Gurú Gobind Singh.
El Adi Granth contiene las principales oraciones para los tres momentos del día: al amanecer comienzan con el Jap Ji, a la tarde después del trabajo se recita el Rehras Sahib y antes de dormir el Kirtan Sohila. Los himnos del Adi Granth son acompañados por melodías o ragas, que a su vez se adaptan a ciertas medidas: Shabds, Astpadis, Vars, etcétera.
Los nombres de los Gurús Sikhs no figuran en sus propios himnos: todos escriben bajo el nombre de Nanak. Sin embargo, antes de cada himno está escrito "Mahala” o "M" seguido por un número que identifica a su autor (Ej.: M1 significa el primer Gurú Nanak; M2 el segundo Gurú, etc.). En cambio, los himnos Bhagatts y Bhatts llevan los nombres de sus autores, excepto Mardana, el único que escribe bajo el nombre de Nanak.
Doctrina fundamental del Sijismo
• Hay un solo Dios, que es adorado con distintos nombres según cada religión. Es inmanente y trascendente.
• El propósito fundamental es entrenar a la mente y a los sentidos para reconocer el principio divino en uno mismo y en toda la creación.
• La cualidad fundamental de los Sikhs es su dedicación constante a las enseñanzas de los Gurús.
• Devoción diaria: meditar, recitar, cantar y recordar a Dios constantemente.
• Sat Sangat: El Sikh Dharma fomenta la compañía sagrada de otros aspirantes como modo de progresar espiritualmente hacia Dios.
• Naam Japna: repetición del nombre, en ocasiones con ayuda de un collar de cuentas (japamala). Se realiza individualmente o en grupo.
• Dharma: Aplicar la rectitud en la vida diaria.
• Servicio al prójimo en necesidad, para socorrerlo y elevarlo. El principal deber de un Sikh es ayudar a los pobres, necesitados u oprimidos.
• No existe ningún lugar, día o momento más favorable que otro. Solo es sagrado el momento y el lugar en que Dios es recordado.
• Libertad de religión. Todos tienen derecho a seguir su propio camino hacia Dios sin sufrir condena o coerción por parte de otros.
• Ausencia de clero. Con la gracia de Dios, cualquier ser humano es capaz de conocer la Realidad Suprema.
• El Sijismo fomenta la alfabetización, el crecimiento individual, el trabajo honesto y la vida en familia. Busca crear una sociedad en la que todos puedan vivir como hermanos.
• El Sijismo condena el adulterio y la promiscuidad.
• Los Sikhs no consumen alcohol, drogas ni tabaco, y su dieta es vegetariana.
• Su doctrina conserva muchos conceptos del hinduismo tales como maya, reencarnación, yoga, karma, ego, liberación. Lo mismo vale para sus prácticas como la meditación, repetición del nombre de Dios, servicio, rectitud, etc., además de sus conocimientos especializados, que en su mayoría provienen de los Vedas.
• El propósito fundamental es entrenar a la mente y a los sentidos para reconocer el principio divino en uno mismo y en toda la creación.
• La cualidad fundamental de los Sikhs es su dedicación constante a las enseñanzas de los Gurús.
• Devoción diaria: meditar, recitar, cantar y recordar a Dios constantemente.
• Sat Sangat: El Sikh Dharma fomenta la compañía sagrada de otros aspirantes como modo de progresar espiritualmente hacia Dios.
• Naam Japna: repetición del nombre, en ocasiones con ayuda de un collar de cuentas (japamala). Se realiza individualmente o en grupo.
• Dharma: Aplicar la rectitud en la vida diaria.
• Servicio al prójimo en necesidad, para socorrerlo y elevarlo. El principal deber de un Sikh es ayudar a los pobres, necesitados u oprimidos.
• No existe ningún lugar, día o momento más favorable que otro. Solo es sagrado el momento y el lugar en que Dios es recordado.
• Libertad de religión. Todos tienen derecho a seguir su propio camino hacia Dios sin sufrir condena o coerción por parte de otros.
• Ausencia de clero. Con la gracia de Dios, cualquier ser humano es capaz de conocer la Realidad Suprema.
• El Sijismo fomenta la alfabetización, el crecimiento individual, el trabajo honesto y la vida en familia. Busca crear una sociedad en la que todos puedan vivir como hermanos.
• El Sijismo condena el adulterio y la promiscuidad.
• Los Sikhs no consumen alcohol, drogas ni tabaco, y su dieta es vegetariana.
• Su doctrina conserva muchos conceptos del hinduismo tales como maya, reencarnación, yoga, karma, ego, liberación. Lo mismo vale para sus prácticas como la meditación, repetición del nombre de Dios, servicio, rectitud, etc., además de sus conocimientos especializados, que en su mayoría provienen de los Vedas.
Conocimientos especializados
La cualidad fundamental del Sikhismo es la dedicación y el discipulado. Esto incluye el conocimiento y práctica de las siguientes ciencias:
Atma and Paramatma Vidya – Conocimiento del Ser o Dios.
Langar Vidya – Preparación de alimentos de forma higiénica para miles de personas.
Raag Vidya – Conocimiento de música hindú.
Shastaar Vidya – Artes marciales.
Prosperity Vidya – Cómo generar riqueza y compartirla.
Marma Vidya – Naad y Kundalini (circulación de la energía en el cuerpo humano), Satnam Rasayan (curación con las manos) y Terapia del nombre o Nam (repetición de mantras para tratar diversos síntomas).
LOS CINCO “K”o artículos de fe Sikh
Las cinco “K” son los símbolos de vestido y apariencia física de los Sikhs, establecidos por el Gurú Gobind Singh cuando se reunieron los primeros miembros del Khalsa (hermandad pura) en el día de Vaisakhi en 1699.
Kesh
• Pelo sin cortar, cubierto por un turbante distintivo. El pelo es un símbolo tradicional hindú de renuncia, y el turbante, de liderazgo.
Kirpan
• Espada ceremonial, que simboliza la disposición para proteger a los indefensos y defenderse contra las persecuciones.
• Generalmente se lleva en un cinturón de tela llamado gatra.
• Nunca debe desenvainarse para atacar, pero puede usarse para la autodefensa o para proteger a un tercero.
Kara
• Brazalete de acero que simboliza fuerza e integridad.
Kangha
• Un peine de madera, que simboliza limpieza y orden. Así como los Sikhs se peinan todos los días, también deben “peinar” su mente con la sabiduría del Gurú.
Kachhera
• Ropa interior de algodón, que simboliza autocontrol y castidad, y prohibición de cometer adulterio.
KHANDA, el emblema sikh
Este símbolo está formado por tres armas, el khanda, situado entre dos espadas curvas llamadas kirpans y un chakkar, arma con forma de disco. Cada arma tiene un significado diferente:
• Khanda: espada recta que simboliza el conocimiento de Dios
• Kirpans: espadas curvas que representan la soberanía política y espiritual.
• Chakkar: arma en forma de disco que simboliza la unicidad de Dios.
Sikh Dharma
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Lugar de origen
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Punjab, estado del norte de India.
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Fundador
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Gurú Nanak
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Sagradas escrituras
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Adi Granth (o Gurú Granth Sahib)
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Símbolo
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Templo
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Gurudwara
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Lugar sagrado
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Nankana Sahib, lugar de nacimiento de Guru Nanak.
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Principales festivales
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Vaisakhi: Abril. Año Nuevo en Punjab
Hola Mohalla: Marzo. Festival de concursos y exhibiciones donde los Sikhs muestran sus habilidades en atletismo, equitación y artes marciales.
Diwali: Octubre. Festival en que se relata la historia de Hargobind, el sexto Gurú.
Nacimiento de Gurú Nanak: noviembre. Cinco hombres llevan el Adi Granth por las calles.
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