EL AMOR ES EL ALIENTO DE NUESTRA VIDA

"El cuerpo es impermanente, todas nuestras riquezas son transitorias, los hijos y la esposa son sombras.

Unicamente las buenas acciones son compañeras perdurables. El que comprende esta verdad es un verdadero hombre"

Encarnaciones del Amor! "Con excepción del hombre, todos los seres en la creación viven y realizan sus funciones de acuerdo con las leyes de la naturaleza. Viven sin ninguna preocupación del mañana y se contentan con cualquier cosa que puedan alcanzar. La naturaleza cuida que no les falte nada necesario para su existencia. Por el contrario, el hombre nunca está contento, no importa cuánto pueda adquirir o de cuánta comodidad disfrute. Ansía varias cosas y considera el deseo por esas cosas como amor. Pero si se fomentan dichos apegos hacia los objetos, no existirá fin para este proceso. No se da cuenta de que este amor está basado en el autointerés y el egocentrismo. Debería ser claro que lo que se ve como amor en el mundo actual es realmente egoísmo e interés en uno mismo. El demonio del egoísmo está presente en cada uno de sus pensamientos, palabras y obras. El hombre se ha vuelto un juguete de los impulsos egoístas. Atrapado en la red del egoísmo, toda su vida se vuelve un espejismo y una trampa. Una persona así nunca puede experimentar la verdadera libertad.

"¿Qué es, entonces, el verdadero amor?

"El verdadero amor es el amor puro, altruista, que no espera recompensa, hacia todos los seres vivientes, considerándolos encarnaciones de lo Divino. Libre de antipatía, amistoso y compasivo hacia todos los seres. No importan las vicisitudes que se enfrenten ni el tipo de penas personales o las privaciones que se puedan sufrir; el verdadero amor permanecerá inmutable. En la actualidad, cuando surge alguna dificultad, o algún problema se presenta, el amor se vuelve odio. El verdadero amor es la dulce fruta que crece de la flor de las buenas acciones. El amor gobierna sin el recurso de la espada, ata sin leyes. Sólo cuando tiene ese verdadero amor puede alguien ser llamado ser humano.

"El hombre sin ese amor es humano sólo en la forma. Al igual que el loto se abre al salir el sol, el corazón del hombre florece cuando el amor entra en él. Como el calor y la luz en el fuego, como los rayos del sol, como las olas en el océano, el amor Divino es la cualidad básica del verdadero ser humano. Solamente cuando alguien se llena con un amor puro, desinteresado, se le puede llamar ser humano.

"Lo que afecta a ese amor puro y Divino es su asociación con los deseos y preocupaciones del cuerpo. ¿Quiénes son nuestros padres; quiénes son nuestros hijos, parientes o amigos? ¿Quiénes somos nosotros, quiénes fuimos en nuestras vidas pasadas; cuál será nuestro futuro?

"Por estar inmersos en los pensamientos de relaciones impermanentes estamos perdiendo de vista el amor Divino, eterno e inmutable.

"La naturaleza del amor divino debe ser comprendida aun en la vivencia de las relaciones temporales. El nacimiento implica la existencia de los padres. Pero la relación entre un hijo y sus padres es sólo corporal. Los padres son sólo el instrumento para el nacimiento, pero no la causa. Sin embargo, aun como instrumentos, los elementos divinos están presentes en ellos.

Debería comprenderse que en el nacimiento humano se tiene a la verdad como padre y al amor como madre.

"Aun si los padres naturales están ausentes, uno no debe olvidar a los verdaderos padres, la verdad y el amor.

"Cuando la verdad y el amor dan a luz a su hijo jñana (sabiduría), se establece el verdadero linaje del hombre.

"La verdad es sagrada. Es válida en todo tiempo: pasado, presente y futuro. No cambia.

"El amor es eterno. Es inefablemente dulce como el néctar. ¿Podrían tener un hijo descarriado o de mente perversa, un amor y verdad de tal naturaleza?

"En momentos de necesidad apremiante fui en su ayuda. No espero nada de ustedes. El mejor servicio que me pueden prestar es el de dedicarse al servicio del género humano de manera desinteresada. Mi vida es Mi mensaje. Obsérvenlo y síganlo. Esa será la mejor forma de adoración y de amor que pueden ofrecerme."

"Sólo cuando uno se libera de la ilusión e ignorancia, y es sabio, puede ser llamado un verdadero ser humano.

"La ignorancia no es la característica inherente del hombre. No hay lugar para aberraciones en él. El egoísmo está fuera de lugar. El debería regocijarse en el éxtasis del jñana (conciencia de lo Divino, autoconocimiento). Su verdadera forma debería ser la bienaventuranza. El discernimiento debe ser natural en él. Actualmente esta naturaleza humana está olvidándose.

"Se podrían preguntar por qué la verdad y el amor sólo tienen un hijo y no una hija. Existe una hija, la cual puede ser identificada como shanti (paz, ecuanimidad de la mente). De aquí que la cualidad que debe ser característica del hombre es la sabiduría, y la paz y la serenidad las cualidades distintivas de la mujer.

"¿Quiénes deben considerarse como amigos y parientes? Los yoguis deberían ser vistos como amigos y las buenas cualidades como los verdaderos parientes. El yoga no consiste en meditación y austeridad, o en diversas formas de control de la respiración. El verdadero yoga es la fusión del alma individual con el Ser Supremo. Es retirar los sentidos de los objetos externos y dirigirlos hacia el interior.

"Yoga implica autocontrol y renunciación, que conducen a la experiencia de ananda (completud, bienaventuranza).

"Deben cultivar pensamientos y actitudes sagradas. Deben llenarse con el sentimiento de la dedicación desinteresada. Esto puede producirse solamente a través del Seva (práctica espiritual de prestar servicio desinteresado a los demás).

"Ustedes deben regocijarse más al dar que al recibir.

"¿Para qué buscar o recibir algo de los demás cuando lo Divino está aquí para darles todo lo que necesitan?

"Todas sus acciones deben estar dirigidas a purificar sus corazones y mentes, con el fin de experimentar lo Divino.

"Cuando el corazón se purifica, la luz de la sabiduría brilla. El corazón iluminado se convierte en el receptor del amor puro.

"El amor lo es todo. Una persona sin amor es un cadáver viviente.

El amor no es la relación entre los seres humanos, o entre el hombre y los demás objetos; está inherente en su propio ser --Yo soy el espíritu inmanente en todos los seres.

"El Atma no tiene forma. Se la experimenta con amor. Si no hay amor, no hay Atma. Es por esto que el amor es el aliento de nuestra vida. Es nuestra alma y nuestro todo; debe ser inmutable."

"Deberíamos creer que el amor santo, sagrado y perenne puede encontrarse en todo corazón humano donde reside Dios. Deberíamos creer que Dios es el morador del corazón y seguir la enseñanza que de éste viene, adoptando buenos métodos para ello. Su padre y su madre, sus hermanos y amigos podrán darles un poco de riqueza, pero sólo Dios puede dar tesoros duraderos de verdadero amor."

Bhagavan Sri Sathya Sai Baba
Extractado y recopilado de "Eterno
Conductor", jun./85 y jul./87