ENTREVISTA CON EL PROF. G. VENKATARAMAN
Les presentamos ahora una conversación con el
Prof. G.Venkataraman, un eminente científico que ha tenido una brillante
carrera científica durante casi cuatro décadas. Nombrado Padmashri, tercer
mayor título honorífico Indio, el Dr. G.Venkataraman es también el recipiente
de otros Premios honoríficos incluidos el Sir C.V. Raman Award, otorgado por la
Comisión de Becas Universitarias, la Medalla Centenaria Sir C.V. Raman, y la
Medalla de la Academia Nacional de Ciencias Indira Gandhi. Es el autor de
varios libros, incluyendo una biografía científica de Sir C.V. Raman. Ha
servido también como el Vice Canciller de la Universidad Sri Sathya Sai.
Conversando con él está el Sr. Ted Henry, un periodista de los Estados Unidos
de América.
T.H.
Dr. G.Venkataraman, es un placer estar aquí
sentado, conversando contigo en el programa de hoy. Pero ¿no te sientes
extraño, sentado a ese lado del micrófono? ¡Porque normalmente eres tú el que
haces las preguntas! (se ríe) (El Prof. G. Venkataraman es quien normalmente
lleva a cabo las entrevistas emitidas en Radio Sai, Armonía Global, Prashanti
Nilayam, Puttaparthi. N. del Tr.).
Eres un hombre de Letras y un hombre de
Ciencias, y yo siempre he creído que la Ciencia y la Espiritualidad simplemente
no se mezclan. ¿Cuál fue la causa de que tú entraras en los mundos de ambas
disciplinas?
Prof G.V.
Bien, me alegro de que me hagas esta pregunta,
pues aprovecharé para clarificar algunas ideas erróneas. Dejaré aparte el
aspecto filosófico, hablando del aspecto meramente humano. El que los
científicos se burlen de la Espiritualidad es sólo una moda reciente. Sin
necesidad de retroceder mucho en la Historia, mira simplemente a Newton, o a
Galileo. Tomemos a Newton. No sé si lo sabes, pero Newton había tenido un deseo
muy grande de ser sacerdote.
T.H.
No, no lo sabía...
Prof G.V.
Y tenía mucha fe en Dios. Siempre se
maravillaba del poder de Dios. Por ejemplo, el creía en el Espacio Absoluto, un
concepto en la Física. Por supuesto, hoy sabemos que no hay Espacio Absoluto,
hay sólo Espacio-Tiempo Absoluto, esto vino con Einstein y es otra historia.
Pero de lo que se trata es de que Newton dijo, “Tiene que haber Espacio
Absoluto - sino no sería consistente con la Divinidad”. Y de manera similar miró su pulgar y dijo,
“El pulgar mismo es suficiente para probar la existencia de Dios”. Y Newton no
era una singularidad aislada, como diríamos en matemáticas, no era una
excepción. Ese era el sentimiento que prevalecía en aquellos tiempos. Has de
saber que hasta el Renacimiento no hubo separación entre la Filosofía y la
Ciencia. De hecho, aún hoy en día, cuando uno saca un Doctorado, es un
Doctorado en Filosofía, en Filosofía Natural. Más tarde comenzaron a separarse
los caminos, y para ello hay muchas razones históricas.
Para mencionarte otra caso más, Maupertius, el
primero en descubrir el principio de lo que llamamos la Acción Mínima, dijo,
“Dios lo ha ordenado de esta manera”. Así que todo el mundo invocaba a Dios, y
atribuía las leyes de la Naturaleza a Dios.
Hace muy poco, en 1920, Werner Heisenberg, por
aquel entonces un hombre muy joven, hizo uno de los descubrimientos más
profundos de ese siglo, el siglo 20. A las tres de la madrugada descubrió las
leyes de la Física Cuántica. Era la primera vez, y luego le escribió una carta
a su hermana, diciéndole, “Me sentí como si estuviera mirándole por encima de
los hombros a Dios cuando Dios estaba componiendo la Sinfonía del Universo”. Y
fue un recipiente del Premio Nobel. No te voy a dar una larga lista de nombres,
pero pasemos a Charles H. Townes, profesor de Colombia, que recibió el Premio
Nobel debido al descubrimiento del Principio del láser y del máser. Dijo, “La
ciencia explica el cómo del Universo, y la filosofía espiritual y la religión
explican el porqué del Universo”.
T.H.
¿Cuándo comenzaste a interesarte en el Porqué?
Prof G.V.
Bien, mi caso es algo diferente - ¡por la
simple razón de que yo llevaba una doble vida, por así decirlo! (se ríe).
Habiendo nacido en la India y habiendo nacido en una familia tradicional, fui
expuesto a la religión, a los grandes épicos, etc. Y a mí de niño me dieron
muchos libros a leer, libros relacionados con nuestros épicos, libros que leí y
que me gustaron. Por otra parte, la forma de Dios que a mí me atraía mucho era
la de Rama, Quién representó la Verdad y la Rectitud. Su vida era la vida de
una Persona Ideal. Y naturalmente inspiraba mucha admiración, y era adorado por
multitudes. Y por aquella época, cuando yo era un niño pequeño, Gandhi estaba muy
presente, y Gandhi adoraba a Rama, de hecho murió repitiendo el nombre de Rama.
Así que adorar a Rama era muy aceptable sobre todo debido a Gandhi.
Pero cuando comencé mi carrera de científico,
sabes, a veces pensaba en Dios y a veces en la Ciencia, y por supuesto, hubo
períodos en que comencé a cuestionarme ciertos aspectos. Pero luego a medida
que fui madurando, y tal vez adquiriendo sabiduría, si me permites decirlo así,
me di cuenta, como dice Baba, de que la Ciencia es sólo la mitad de la historia.
Y la Espiritualidad es la otra mitad. A no ser que tengas ambas mitades, no
tienes la imagen entera.
T.H.
Ya que mencionaste el nombre de Gandhi - si me
acuerdo correctamente, en el año 1935
Gandhi estaba hablando con un reportero de un periódico de Londres, y
fue entonces cuando hizo el comentario, “Mi vida es mi mensaje”. Hay Alguien
más que también ha hecho ese comentario a menudo. ¿Qué significado tiene Sathya
Sai Baba en tu vida?
Prof G.V.
¡Para que te explique eso necesitaríamos más
de media hora! Pero permíteme que lo ponga de manera muy simple. Pienso que
Sathya Sai Baba no sólo me ha transformado, sino que ha hecho que mi vida cobre
sentido. Yo vivía metido en muchas cosas diferentes, a mi me gustaba esa vida,
me daba satisfacción, por lo menos algunas de esas cosas. A veces, los mismos
sucesos acababan conmigo, pero eso es otra historia. Pero no realizaba la
respuesta a ciertas preguntas básicas. Sabes, Steven W. Hawking finaliza su
libro, no me acuerdo del título exacto, tiene algo que ver con el tiempo...
T.H.
¿“La Historia del Tiempo”?
Prof G.V.
Si, creo que sí. Fue un bestseller del New
York Times. Hawking acaba el libro con algunas preguntas como, “No sabemos
porqué el Universo existe, ni cual es nuestra relación con él”, etc. A mi estas
preguntas me parecieron muy interesantes, porque la filosofía espiritual
comenzó hace miles de años, cuando el ser humano empezó a hacerse estas mismas
preguntas. El hombre de antaño vivía bajo el toldo de las estrellas. Así que
veía la naturaleza y se comenzó a cuestionar todas estas cosas, usando el don
que Dios le había dado.
Ahora vivimos en casas, cerramos las ventanas,
cerramos las puertas, ponemos cortinas, y todo lo que vemos es el techo y la
pantalla de la televisión, por lo que no nos asombramos de nada, no tenemos ni
que pensar, hay otros que piensan por nosotros. Pero el hombre de antaño no era
así, y se hizo estas mismas preguntas. ¿De dónde ha venido todo esto? ¿De dónde
vengo yo? ¿Qué relación hay entre mí y el Universo?
Hoy día aún tenemos las mismas preguntas. Eso
es porque no prestamos atención a las respuestas a esas preguntas, respuestas
que fueron descubiertas por hombres sabios en diferentes partes del mundo.
Sathya Sai Baba me hizo entender cuales son
esas respuestas. E hizo que reflexionara acerca de muchas cosas. Y también hizo
que entendiera el verdadero propósito de la vida humana. El verdadero propósito
de la vida humana, tal y como lo veo ahora, es el reconocer la Divinidad
inherente en el ser humano. Y esto es algo que ha sido reconocido por muchas
religiones. Todas ellas dicen, “Dios creó al hombre a Su imagen y semejanza”.
Bien, si Dios es Divino, ¡entonces el ser humano ha de ser inherentemente
Divino también, si es la imagen de Dios!
T.H.
Para llevar a cabo la transformación a la cual
acabas de aludir, hace falta un esfuerzo. Y según tu propia admisión, la vida
tal y como la vivías te daba satisfacción. ¿Qué sucede con la persona que veo
frente a mi hoy día? ¿Cuál fue la razón de que decidieras hacer ese esfuerzo
que el llevar a cabo esta transformación interna requiere, cuando eras
perfectamente feliz, tal y como suena, antes de ello?
Prof G.V.
Bien, una pregunta muy interesante. Tal vez
diría que más que decidir yo hacer un esfuerzo, era algo que estaba divinamente
trazado. La vida me había dado unos cuantos reveses mayores. Y tal y cómo dice
uno de nuestros Santos, es solamente cuando te sientes miserable que comienzas
a pensar en Dios. Cuando todo nos va bien, tomamos el crédito de ello y
decimos, “Dios no tiene nada que ver con esto, el crédito es mío”. Por
supuesto, yo no dije nada parecido, pero mientras somos felices, Dios está
fuera de la pantalla de nuestro radar. Pero cuando nos sentimos miserables,
entonces empezamos a pensar en Dios. Y bien, una cosa llevó a la otra y vine
aquí y vi a Bhagaván. Me cautivó, y pasé por toda la euforia del principio,
pero luego, el científico dentro mío despertó y comencé a prestar seria
atención a Sus discursos. Leí mucho, aquí y allá, acerca de cosas de las que
nunca había leído nada, y comencé a reflexionar. Porque eso es lo que haces en
la Ciencia, sabes, lees la tesis de otro científico y tratas de descubrir si
tiene razón o no. Si ves que está en lo cierto, tratas de superarlo. Si no está
en lo cierto, destruyes su teoría. Así es cómo se juega el juego...
Pero aquí yo traté de entender lo que Baba
decía, y no sólo me daba mucho sentido, sino que también me decía cómo podía
usar el resto de mi vida para serle útil a la Humanidad. Y aquí me influyó
mucho una frase de Victor Weisskopf, un científico austriaco que se fue a
América al principio de los años 30, escapando de Hitler, claro. Era un físico
muy bueno, muy distinguido, y un Europeo muy culto. Y dirigiéndose a la
Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, dijo, ”El conocimiento sin
compasión es inhumano, y la compasión sin conocimiento es inefectiva”.
Así que me dije, “Se supone que tengo cierto
conocimiento científico, ¿quiero ser humano o inhumano?” Bien, la elección era
obvia, especialmente estando en la proximidad de Bhagaván Baba. Así que he
tratado de usar el tiempo que tengo y los talentos que Dios me ha dado en el
servicio de la Humanidad, en cosas que yo sentí eran útiles y que estaban a mi
alcance.
T.H.
Yo mismo he reconocido compasión aquí, la he
visto con mis propios ojos, también he visto mucho conocimiento, y un fenómeno
de Amor. Pero yo he venido aquí varias
veces. Ahora bien, hay mucha gente en este mismo momento escuchando esta
entrevista en diferentes partes del mundo, y algunos de ellos tal vez oigan el
nombre de Sai Baba por primera vez. ¿Quién es Sai Baba?
Prof G.V.
Esa es una buena pregunta. De hecho El mismo
ha puesto esa pregunta y la ha respondido muchos años atrás. Bien, todo depende
de a qué nivel estés buscando la respuesta. Si estas buscando una respuesta a
nivel periodístico, te daría un breve boceto, Sai Baba nació en tal y tal
familia el 23 de Noviembre del año 1926 en una remota aldea de unos cien
habitantes etc. Si me pides que te describa a Bhagaván Sri Sathya Sai Baba, te
diría, en términos puramente humanos, que es Amor Puro personificado, y también
todas las ramificaciones del amor puro, tales como la compasión, la
tolerancia...
T.H.
¿A veces severidad?
Prof G.V.
Sabes, la severidad es sólo una apariencia.
El no puede realmente ser severo, es sólo como el padre que regaña al hijo. El
padre no puede dejar de amar a su hijo, ni la madre, pero a veces es necesario
un poco de corrección. Así que yo no pondría mucho énfasis en esa severidad.
Por cierto, eso me recuerda un incidente que tal vez te guste oír. Es algo que
sucedió hace muchos años. Durante la guerra del Vietnam había un grupo de
músicos encargados de entretener a las tropas estacionadas ahí. Tenían unos
días libres, de manera que pudieran descansar y recuperarse. Y por alguna
extraña razón decidieron venir a Bangalore a ver a Sai Baba, en vez de ir a
Bangkok o a Hong Kong, que eran los lugares dónde la gente normalmente iría, en
aquellos momentos. Y tuvieron muchas experiencias. Y lo interesante es lo
siguiente. Había entre ellos un hombre que era el líder del grupo. Baba parecía
que siempre lo miraba como si estuviera molesto con él, o enfadado. Pero el
hombre de esta historia no se preocupaba por ello. Esto continuó durante seis o
siete días, y un día Baba le preguntó, “¿No crees que estoy enojado contigo?”,
y el hombre tranquilamente respondió, “No creo que estés enojado conmigo, pero
sí que estás actuando como si lo estuvieras. ¿Cómo podrías estar enojado? No
conoces la ira”. Y Swami se rió y dijo, “Es cierto. ¡Ese es mi Ser real y tú
has logrado ver a través del velo!”
T.H.
Yo Le he visto también bromear con un gran
sentido del humor. ¿Cuánto ves de esta faceta Suya, regularmente? Porque tú
estás tanto a Su alrededor…
Prof G.V.
Sabes, todo depende. Diferentes personas ven
diferentes aspectos de Baba. El dice, “Cuando estoy con un niño, soy como un
niño, cuando estoy con un hombre, soy como un hombre”, etc. Aquí vienen muchas
personas de muchos lugares, y vienen con muchas expectativas, así que Baba les
da felicidad a través de este tipo de experiencias. Cuando estás cerca Suyo y
trabajas para El - con nosotros no dedica mucho tiempo a estas cosas.
Ocasionalmente si, pero la mayoría del tiempo encontramos nuestra felicidad
simplemente en trabajar para El, y saber que El lo sabe todo. No lo decimos, ni
El nos lo pregunta.
T.H.
¿Has sido capaz, tú personalmente, de penetrar
ese velo de quien Sai Baba es?
Prof G.V.
Bien, no sé si puedo responder a esa pregunta
en su totalidad, porque yo sé, con mi entendimiento y mi razón, que El es una
Encarnación de Dios, lo sé por razones lógicas y todo eso. Pero pienso que como
ser humano, eso no es suficiente. Tengo que sentirlo en mi corazón, sólo
entonces podré decir que he penetrado el velo. A veces, hay momentos que siento
que lo he penetrado, y luego hay otras veces en que no puedo sentirlo con total
certidumbre. Tal vez porque en esos momentos mi mente está divagando y mi
corazón no está armonizado. Pero en lo profundo de mi corazón sé que El es una
Encarnación, que es Amor Puro, que es Compasión. No tengo duda alguna de ello.
T.H.
Hay más de 6 billones de personas en esta
tierra. Sai Baba ha estado aquí desde hace unos 80 años. Si El es eso que
acabas de describir y más, ¿por qué sólo unos pocos, relativamente hablando,
conocen Su nombre?
Prof G.V.
En lo que a conocer Su nombre se refiere, creo
que puedo responder a tu pregunta. Es principalmente porque El nunca ha buscado
publicidad, ni tampoco la permite. Si comenzaras a utilizar los medios de
comunicación y de publicidad, Su nombre sería mucho más conocido de lo que lo
es. Pero no nos olvidemos de que incluso sin ello ha llegado a incontables
corazones en muchos países. Hay países de donde no ha venido nadie, como por
ejemplo Cuba, pero El es conocido allí. Leonardo Gutter de Argentina me dijo
que hay algo así como 20.000 seguidores de Sai Baba en Cuba, incluido el
hermano de Fidel Castro.
T.H.
¿Cómo conocieron a Sai Baba?
Prof G.V.
Bien, El tiene Sus propios métodos. No
recuerdo los detalles, pero alguien mandó allá una foto o una carta, y así
comenzó todo. Es algo que sucede una y otra vez. Te daré lo que en mi opinión
es un ejemplo clásico. Si en tu corazón tienes un sentimiento por Dios, y no
tiene que ser Sai Baba …
T.H.
… Y eso es algo que El ha dicho muchas veces…
Prof G.V.
Lo dice. Y lo siguiente le ha sucedido a mucha
gente. Si en tu corazón tienes un sentimiento por Dios, El vendrá a ti. Ha
sucedido una y otra vez. Toma el caso de James Sinclair, que nos lo ha contado
en primera persona. No sabía nada acerca de Sai Baba, pero a menudo solía
preguntarse a sí mismo, “¿Cómo es que he llegado 2000 años demasiado tarde?
¿Cómo es que no he nacido en la época de Cristo?” El tenía un profundo anhelo
por Dios. Y Swami lo llamó. Y este tipo de cosas le ha sucedido a mucha gente.
Mira a Rusia. Hace diez años no había ni un solo ruso por aquí.
T.H.
Hoy son muchos los que vienen…
Prof G.V.
Lo que sucedió es que en algún lugar en lo
profundo del corazón de estas personas había una gran sed de Dios. Y creo que
Baba le dijo a alguien, en el tiempo en que Rusia estaba cambiando, “La gran
nube negra sobre Rusia se está alzando”. Y cuando se levantó, dejó un vacío, y
buscaron aquí y allá, y los que Lo anhelaban comenzaron a venir aquí. Por cada
persona que viene, hay por lo menos cien otros que no son capaces de venir,
hemos oído muchas historias de ello. Así que mi respuesta a tu pregunta es que
si anhelan a Dios, El se les revelará de una manera u otra. En el momento
correcto.
T.H.
Parece que en Occidente esta teniendo lugar un
despertar, una apertura de conciencia, particularmente en América. Hace no
mucho había un artículo en el International Herald Tribune, otro en el
complemento del domingo del New York Times, de media página. He de imaginar que
hay miles, sino millones, de personas que están viendo Su nombre impreso,
viendo Su foto, por primera vez. ¿Están listos para agrandar las puertas del
ashram, para acomodar a la multitudes de personas que vengan a ver a Sai Baba?
Prof G.V.
No hay necesidad de agrandarlas, ¡además colapsarían!
(se ríe). Si es que vienen “en multitudes”. Yo creo que ya están viniendo. En
India, cada vez que Baba viaja a algún lugar, acuden enormes multitudes. Lo he
visto personalmente en el año 1999. En ese año tuve el placer, el privilegio y
la bendición de ir con El primero a Delhi y luego a Bombay. Fue un viaje de
siete días. Baba tuvo que dar Darshan en el mayor estadio de la India, el Nehru
Stadium, que fue construido para los Juegos Asiáticos. Es un lugar donde tienen
cabida unas 100.000 personas, y ahí fue donde tuvo lugar el evento, y la gente
llenaba todo el estadio, el área simple y la galería, había un tremendo hambre
por El. Y ha sido así desde hace años. Yo creo que la gente es atraída por El
en su debido momento, en el momento correcto.
T.H.
Hablaste de ateos,
gente que no ha tenido ninguna religión durante muchos años, que ahora está
siendo atraída por Baba, gente de Cuba, de Rusia. Por supuesto, aquí en la
India hay millones que Le tienen un afecto extraordinario. También soy
consciente de que el Primer Ministro de la India, que es hindú, es devoto de
Sai Baba, y de que el Presidente de la India, que es musulmán, siente de la
misma manera. Háblame un poco de esa habilidad que tiene de unir a gente de
diferentes trasfondos religiosos, algo que Lo hace único.
Prof G.V.
Es muy simple. El no habla de religión, El
habla el lenguaje del corazón. Eso es todo. La mejor manera de describirlo es
explicando lo que un Sr. Wellington nos dijo hace algunos años, en una charla
que dio aquí. Este Sr. Wellington, debiera mencionar, es cristiano, y viene del
estado de Kerala, al Sur de la India. Y era un miembro del Gobierno Comunista.
Es la primera vez que un gobierno comunista ha sido instalado a través de las
elecciones, eso sucedió en Kerala. ¡Llegaron al poder mediante las elecciones,
y no mediante los tiros! Este señor era un miembro de ese Cabinete, y era el
ministro de la Salud. Baba fue a Kerala, y le pidieron que bendijera un
Hospital, y este hombre tenía que venir al evento como el ministro de Salud. Y
no le gustaba nada, porque era un comunista, y se suponía que era cristiano.
Pero fue. Y quedó encantado, y decidió venir a ver a Baba aquí a Puttaparthi.
Asi que vino, y al entrar por la puerta del ashram, sintió que estaba en una
atmósfera hindú, y eso no le gustó nada. Baba le llamó a una entrevista, y lo
primero que le dijo fue, “Wellington, se un buen cristiano. No un cristiano,
sino un buen cristiano”. Este hombre quedó asombrado porque Baba no estaba
tratando de convertirle de una religión a otra.
Baba siempre dice, “Quiero sostener a las
personas en su propia fe, que entiendan su fe con mayor profundidad y la
fortifiquen”. Un credo es sólo un camino en particular a Dios, ¿porqué cambiar
de camino? No hay necesidad. Y esto es por lo que gente de tantas diferentes
religiones se siente atraída a El. En el caso de musulmanes, yo he visto venir
a grupos muy grandes de musulmanes, en particular del Irán. Vienen, les da
entrevista, le dicen, “Baba, queremos presentar cantos devocionales”, así que
les permite que canten bhajans. Y todos sus bhajans son a Allah. Y nosotros –
por supuesto, no conocemos los cantos, así que no podemos participar en ellos.
Pero estamos ahí sentados, escuchando, y el programa continúa durante tal vez
media hora.
Baba no tiene sentimientos divisivos. De
hecho, si sales del ashram y vas al pueblo, verás una mezquita. Esta mezquita
fue construida por El, porque los musulmanes de este pueblo tenían que ir hasta
Bukkapatnam, que es un pueblo mayormente musulmán, y que está a seis
kilómetros, y les resultaba muy difícil. Así que Baba les dijo, “No os
preocupéis, no tenéis que caminar tan lejos, yo os daré una mezquita”. Y les ha
dado una mezquita. El no tiene diferencias.
Hace algunos años se celebró una boda en masa,
en la cual se condujeron al mismo tiempo las ceremonias para el casamiento de
un número de gente tan pobre que no podía permitirse el coste de una boda. Yo
estaba presente, era durante las celebraciones del 70 Cumpleaños de Swami. Allí
había cristianos, había musulmanes. Vinieron sacerdotes musulmanes que llevaron
a cabo las bodas de los musulmanes de acuerdo a sus ritos, había sacerdotes
cristianos, que celebraron las bodas a su manera, y por supuesto, había
hindúes, que eran la mayoría, y ellos llevaron a cabo el matrimonio de acuerdo
a sus costumbres. A Baba simplemente no le interesan las diferencias en los
detalles de los procedimientos. El dice,
“Mi lenguaje es el lenguaje del corazón, y Mi religión es la religión del
amor”. Así que no hay problemas. Somos nosotros los que creamos los problemas.
El no tiene problemas.
T.H.
Aquí me he encontrado con personas que están
muy apegadas a la forma de Sai Baba, y me imagino que tú no eres ninguna
excepción, y supongo que trabajas para El porque El así te lo ha dicho. ¿Qué
sucedería si de repente El te dijera que fueras a trabajar otra vez al mundo
fuera del ashram, que fueras al lugar de donde viniste, a Delhi o a Bombay? ¿Te
resultaría fácil hacerlo? ¿Si El lo quisiera así, que no estuvieras aquí?
Prof G.V.
Permíteme que te responda la pregunta en dos
partes. Primero - ¡Espero que no me lo pida! (se ríe) Pero - si El me lo
dijera, yo Le obedecería, sin vacilar. Porque mi deber es hacer lo que me diga,
y esperar que El este complacido con lo que hago. En cuanto a mi se refiere, no
tengo dudas con respecto a ello. Pero diferentes personas están hechas de
diferentes maneras. Yo le doy mucha importancia a lo que dice Baba, y Baba
habla a menudo de la importancia de obedecer las ordenes Divinas. Si El me lo
dice como una orden divina, definitivamente lo haría. Tal vez lloraría un poco,
pero eso es otro tema. Llevo siempre un pañuelo conmigo, así que eso no tiene
tanta importancia...
T.H.
Probablemente ya hayas derramado alguna que
otra lágrima alrededor de Sai Baba, pero de alegría, por las simple razón de
que pareces estar en una posición muy afortunada, estando tantas veces en Su
proximidad inmediata. ¿Cómo describirías la faceta humana de Sai Baba, que
tienes la fortuna de ver tan a menudo?
Prof G.V.
Bien, yo diría que Baba mismo lo ha descrito
de una manera que responde tu pregunta. Puedes estar muy cerca suyo y
perdértelo, y puedes estar muy lejos físicamente, y sin embargo estar muy cerca
de El. Supongamos que yo estoy aquí sentado para el Darshan, y Le veo llegar.
El viene, recibe unas cuantas cartas, le da vibhuti (ceniza sagrada) a uno y
habla con otro. Le puedes ver meramente como lo haría un periodista, desde un
punto de vista mundano, pero si le observas con mayor atención, ves con mayor
profundidad. Infieres. Te daré un ejemplo de a lo que me refiero. El viene,
viene lentamente, de repente se detiene y habla con alguien.
Hay dos razones por las que lo hace. Lo hace
para darle felicidad a esa persona, y se queda ahí hablando también para que la
gente ahí sentada lo puedan ver bien, más de cerca. Esto es algo que la gente a
veces no aprecia, realmente. De esta manera le pueden ver sonreír, bromear,
hablar, y esto en sí mismo ya les da mucha felicidad. Así El pasa casi veinte o
veinticinco minutos, y son miles los que le pueden ver, y es para ello por lo
que vienen de tan lejos. Así que aunque no te hable a ti directamente, Le ves
durante 25 minutos. Te recarga.
Luego sucede lo siguiente, y yo lo he visto
muchas veces, y esto es lo que realmente me confirmó su Divinidad a mi
personalmente. El viene con una sonrisa maravillosa. Y cuando se detiene en
algún lugar a hablar con alguien, o aunque sólo se detenga pero no hable – yo
he visto cómo el rostro de la gente se ilumina con sólo verle, cuando El pasa
por entre ellos. Hay una refulgencia extraordinaria que ilumina las expresiones
de aquellos por entre los que pasa en el momento en que pasa. Y esa refulgencia
me convence de que en el interior de esas personas reside Dios, de que hay una
Divinidad inherente en ellos. Hablo de todos, y a veces son personas que
aparentemente no tienen mucho refinamiento humano, por decirlo de alguna
manera. Pero cuando El pasa entre ellos, cambian por completo, Dios mío. Ningún
ser humano puede hacer algo así.
A veces cuando se detiene, pareciera que ve la
Infinidad. Es como si todos los que están frente a El se hubiesen disuelto y se
hubiesen hecho Uno, y El es uno con ellos. Está en un estado diferente, de
Unicidad, y ha incluido en esa Unicidad a todos los que están ahí sentados. Yo
lo he visto. Entonces de repente sale de ese estado y comienza a hablar con
alguien, así que ves la Divinidad a un nivel relativo, practico, y en mayor o
menor medida a un nivel abstracto, y por eso, es todo una pregunta de cómo tu
Le ves. El dice, si miras a Dios con un ojo humano, verás un ser humano, si
miras a Dios con visión divina, veras lo Divino.
Esto no solamente vale para la forma de Sai
Baba, vale también para la Naturaleza. Recuerdo un incidente que tuvo lugar
hace muchos años. Yo estaba en los Himalayas, en un lugar llamado Gulmar, en
Cachemira, en el norte de la India. Había un arquitecto conmigo que trabajaba en nuestro
departamento, y que era cristiano. Y el miró todos esos maravillosos picos nevados,
y miró los valles, y dijo, “Mira eso. No necesitamos construir iglesias, esta
es la mayor iglesia que hay, y ha sido construida por Dios”. Así que él no
estaba viendo las montañas, estaba viendo a Dios. Si miras a Dios, verás a
Dios. Si Le miras como ser humano, Le verás solamente como ser humano. Yo
pienso que es una cuestión de percepción, y de tu condicionamiento, y de tu
actitud. No sé si estas de acuerdo conmigo, pero ésta es la respuesta que te
daría a tu pregunta...
T.H.
Si, si estoy de acuerdo. Pero aun estoy
intrigado y quiero regresar al comienzo de esta conversación, al hecho de que
eres un científico. Porque aparte de ver a Baba con tus ojos, oyes Sus palabras
con tus oídos y las procesas como científico que eres, las procesas como
persona educada. Y en algún punto del camino has hecho este cambio de ver a
Baba más con tu corazón que con tus sentidos. ¿Es esto algo que sucedió de
manera natural? ¿O tuviste que aprenderlo?
Prof G.V.
¡Pensaba que primero era un ser humano, y
únicamente después un científico!
T.H.
Bueno - muchos de nosotros nos dejamos
distraer tanto por lo que nos rodea, por los misterios de la vida, que a veces
nos obsesionamos sólo con ello, y nos perdemos el sentimiento tras todo ello…
Prof G.V.
Sabes, la gente se obsesiona con la ciencia
por dos motivos. Uno de ellos es que les da una posibilidad de estar en el
centro de la atención publica. Y luego…
T.H.
Pero eso puede ser valido para cualquier
profesión.
Prof G.V.
Si, es cierto. Pero mucha gente se dedica a la
ciencia en particular porque compites con personas muy inteligentes. Y luego
está el hecho de hacer descubrimientos - pero hay gente que después de un
tiempo se cansa de ello. Y en lo que a mi se refiere, yo siempre tenia una
especie de parte social dentro de mi. Siempre me molestó ver la pobreza, siempre
me molestó la crueldad, la animalidad dentro del ser humano. Porque sabes, de
alguna manera crecí bajo Gandhi. Para mi la ciencia no siempre tenía
precedencia, no siempre era lo primero. Los problemas de la humanidad siempre
me preocuparon, y llegó un momento en que me
dije, “Bien, si he de unir estas dos partes dentro de mi en lo posible,
y si una de ellas toma precedencia sobre la otra, que así sea, no hay
problema”. Así que cuando dejé la investigación científica no me supo mal,
realmente. Y de hecho, incluso dentro de mi carrera científica, por lo menos al
final, más que dedicarme a la ciencia me dedicaba a la educación, siempre
trataba de inculcar la importancia de los valores, de ser íntegro, sincero con
uno mismo, la importancia del carácter. Enfatizaba mucho estos aspectos, y
luego, cuando años mas tarde me encontraba con algunas de estas personas y
ellas me agradecían el haber sido tan severo con ellos en el comienzo de sus
carreras, me sentía muy feliz.
T.H.
Pareciera que Baba está enviando al mundo
embajadores de todas estas cualidades. Los estudiantes de sus Institutos que yo
me he encontrado como adultos, son faros de luz dentro de su comunidad, en
Occidente, en América. Eso es algo que no hemos visto en nuestras escuelas
desde hace mucho tiempo, donde estos valores, lamentablemente, no reciben mucha
atención.
Prof G.V.
Eso es porque han cambiado nuestras
prioridades. Al fin y al cabo, yo he leído acerca de George Washington y como
él se mantenía firme en el camino de la verdad, sin miedo a las consecuencias.
Y si escuchas los discursos de Baba con regularidad, te asombrarías de la
frecuencia con la que menciona a Abraham Lincoln. Si hay dos personas a las que
menciona con frecuencia, son Buddha y Abraham Lincoln. De hecho, las menciona con
mayor frecuencia que a Cristo, porque de alguna manera son casos clásicos.
T.H.
Quisiera hacerte una pregunta acerca de la
labor humanitaria de Sathya Sai Baba, los hospitales, que están más allá de
cualquier descripción, las escuelas, el sistema educativo, los proyectos de
agua potable. Supongo que no hay ninguna manera en que ni siquiera Baba pueda
satisfacer estas necesidades a nivel universal. ¿Cuál es el propósito de esta
labor? ¿Es el servir como modelo para otros? ¿Para demostrar que esta labor
puede ser llevada a cabo incluso en la India, con muy poco dinero, y de manera
efectiva? ¿Es ése el propósito por el cual Sathya Sai Baba les da tanta
atención, para servir como modelo para otros?
Prof G.V.
Yo diría que hay muchas razones para ello. Yo no
puedo hablar por El, pero si puedo decir que hay algunas lecciones obvias por
aprender. La primera es que has de ser altruista en cualquier cosa que hagas,
sea algo grande o algo pequeño. Si hay en ti algún trazo de interés propio,
entonces hay posibilidades de fracasar, pero si tu acción o actividad o labor
es totalmente altruista, entonces hay una enorme posibilidad de que
fructifique. Una persona altruista está llena de amor, y el amor es mucho más
poderoso de lo que pensamos. Yo diría que estos proyectos son demostraciones
del poder del Amor. No es sólo el hospital y el proyecto de agua potable, esto
y lo otro - son tantas las cosas que hace. El quiere mostrar que la manera de
resolver problemas es el amor, que no hay ninguna otra manera. El conflicto
ciertamente no va a resolver ningún problema. Puede hacerlo detonar, puede
barrerlo debajo de la alfombra, puede, supuestamente, ponerlo bajo control.
Pero sólo para que más tarde brote con una violencia mayor.
T.H.
El dice que no representa ninguna religión,
que Su religión es la religión del amor. Oigo esa palabra una y otra vez, pero
supongo que es la palabra mas difícil de entender, para el ser humano en
general, incluido yo – qué significa realmente el amor. Hablas acerca de actuar
desinteresadamente. Yo no conozco a muchos que sean capaces de ello...
Prof G.V.
Sabes, hemos perdido la práctica, y por ello
pensamos que es imposible. Pero en cierta medida todo nosotros estamos vivos
debido al amor desinteresado, pero no nos damos cuenta de ello. Déjame
describirlo así, he reflexionado mucho acerca de ello. Mira un recién nacido.
El recién nacido no puede sobrevivir a no ser que la madre esté dispuesta a
levantarse en medio de la noche y alimentarlo, limpiarlo, cuidarlo, etc. Esto
es amor desinteresado en acción. Y este es en verdad el amor de Dios por el ser
humano. Tú y yo no estaríamos vivos si nuestras madres no hubiesen actuado así.
Y cada madre sobre la tierra lo hace todo el tiempo, desde el principio de la
raza humana, pero no le prestamos atención a este hecho. De alguna manera,
vienen otros factores y lo eclipsan.
La vida continúa debido al amor, y no es algo
confinado a los seres humanos. Mira a una tigresa, cómo protege a sus
cachorros, un gato, como protege a sus gatitos. Dios les ha dado esto a los
seres vivos, afabilidad, compasión y amor. Por supuesto, aparece en forma
distorsionada. En verdad, nuestro problema es que lo que estamos tratando de
hacer es eliminar estas cualidades de nosotros, de nuestra vida. Ese es nuestro
problema. Baba dice, “No, mantenedlas vivas”.
T.H.
¿Durante cuanto tiempo más quieres seguir
sirviendo en variedad de posiciones en este tema y capacidad, antes de que
decidas simplemente retirarte y disfrutar del fruto de tus logros durante
tantos años?
Prof G.V.
Es una pregunta interesante. Justo antes de
que me retirara del servicio científico, vine a ver a Baba y le dije “Quiero
venir aquí y trabajar aquí”. El me dijo, “No te estás retirando, ¡voy a
cambiarte los neumáticos!” (Juego de palabras en inglés, el original dice, “You are not retiring, I
am going to re-tyre you!”) Así que con Baba uno no toma
vacaciones. Baba dice, “Cambiar el tipo de trabajo o tarea es descanso”.
Y de hecho, sabes, ya no tengo preocupaciones
u obligaciones pendientes, y no tengo ningún compromiso o plan en particular al
que atender. ¡Mi única queja es que Dios me ha dado solo 24 horas por día! No
creo que lo pueda extender y hacer que dure un poco más. Por supuesto, si como
Einstein dijo, fuéramos capaces de viajar a la velocidad de la luz, podría
hacer que esas 24 horas duraran algo más. Pero eso no lo puedo hacer. He de
estar donde estoy y hacer mi trabajo. Siento una fortaleza enorme, y mucho
placer y felicidad en hacer el trabajo que Baba me ha encomendado. ¿Así que
porqué cambiarlo por otra cosa? ¡No pienso cambiarlo por nada, de ninguna
manera! No puedes venderme un ticket a Hawai porque no lo voy a comprar...
T.H.
¿Dirías que éstos son los días más felices de
tu vida, o podrías ser enviado a Paris o Hawai y encontrar allí mayor felicidad?
Prof G.V.
No. Tal y como le dije a otra persona – éstos
son los mejores años de mi vida. Y sin duda alguna son los años más útiles de
mi vida. Sé quien soy, finalmente, sé lo que estoy haciendo, sé porqué lo estoy
haciendo, para quien lo estoy haciendo, y le estoy muy agradecido a Dios por
darme esta oportunidad. Si El me manda a Hawai a cumplir con alguna tarea, ¡me
verás ahí trabajando, y no en las playas!
T.H.
Una última pregunta, ya que se nos está
acabando el tiempo. Si éstos son realmente los mejores días de tu vida, y si no
cambiarias tu lugar con nadie en la faz de la tierra, creo que esto es lo que
has dicho, por extensión, entonces - para la persona que oye hablar de de Sathya Sai Baba por primera vez - ¿Qué es
la cosa más importante que le dirías en este momento, que le ayudara a entender
porqué esta transformación ha ocurrido en ti, que te hace sentir que éste es el
tiempo más importante de tu vida?
Prof G.V.
Bien, yo diría que entendí quien soy
realmente. Soy un ser humano, y he de vivir como un ser humano. Y Baba nos ha
dado una definición del ser humano, dice, “Un ser humano es aquel que tiene
corazón”, y para corazón, utiliza la palabra en sánscrito, ´hridaya´, y dice,
“Hridaya es la palabra ´hrid´, más ´daya´, y daya en sánscrito significa
compasión. Así que, a no ser que tu corazón se desborde de compasión, no eres
un ser humano. Y yo diría, Puttaparthi le esta diciendo al mundo ahora,
descubre tu corazón, descubre la compasión y deja que llene todo tu cuerpo, y
deja que fluya a través de tu cuerpo en actos de amor, es decir, de amor
desinteresado.
T.H.
Gracias, Prof. G. Venkataraman, suenas muy
bien desde ese lado del micrófono. ¡Debieras quedarte ahí durante algunos años
más! (se ríe)
Prof G.V.
Gracias a ti, ha sido un placer hablar contigo
y un cambio hablar a este lado del micrófono...
SAIRAM
Cortesía de Radio
Sai Armonía Global
(paginas web: radiosai.org y h2hsai.org)
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